Te deseo una vida llena de primeras veces. Y no lo digo porque seas joven y aun tengas todo el mundo a tus pies. Lo que digo quiero que te sirva para ahora de la misma manera que a tus 88 años.
Llena de primeras veces.
¿Entendés lo que es eso? Muchas veces decimos que no. No por "paja", no por "asco", no por "verguenza", no por "miedo", no por cualquier estupidez. Y sí, quizá la mayoría de las cosas no te cambien la vida si las hacés o no las hacés.
Pero, ¿qué es la vida sino ir sumando hechos?
Vamos cerrando puertas sin siquiera darnos cuenta que hay toda una habitación que nos estamos perdiendo ver, sentir, vivir.
¿Cuán grandioso sería dejar este mundo sabiendo que no te quedó nada por hacer que estuviera a tu alcance?
Llenémonos de primeras veces.
Y cuanto más locas, mejor.